martes, 25 de febrero de 2014

Una alternativa al régimen. Dos realidades ¿Secundarias?

Frente a la inercia, hasta ahora triunfante, de aplicar las políticas neoliberales más anti sociales de los poderes dominantes en España y en Europa, capitaneados por la troika; frente al intento de restauración borbónica, de reflotar una monarquía en horas bajas, como el mejor envoltorio coercitivo para evitar cualquier propuesta de cambio económico, social y político, no valen las retóricas radicales alternativas, si no van acompañadas de propuestas y medidas concretas visibles, identificables, comprensibles y ampliamente defendidas. O sea, decir y dar ejemplo de que estamos defendiendo las más elementales condiciones de vida de la mayoría trabajadora y popular, rechazando los recortes sociales de todo tipo, es algo insoslayable. Pero no entender que lo anterior, como la base de la lucha social, es poco si no va acompañado de una propuesta de cambio social a explicar y construir, ante el lastre de un sistema económico caducado históricamente y un régimen político de democracia subordinada a los poderes económico-financieros, en gran medida corruptos, sería no entender que lo que está ocurriendo desde hace años no es un episodio político secundario sino una de las expresiones más claras y duras de la actual lucha de clases. En la línea de lo dicho, las propuestas concretas y la estrategia de cambio para avanzar hacia una nueva política económica y social y un nuevo régimen político republicano socialmente alternativo al actual, deben formar parte de la propaganda diaria del partido, y de Izquierda Unida, por tierra, mar y aire. No se trata sólo de procesos electorales, sino y, sobre todo, de acciones sociales permanentes, coordinadas y unitarias en los centros de trabajo, de estudio y en la calle, y la utilización a fondo de todas las instituciones en las que estamos presentes.

Las elecciones europeas pueden ser un momento de ensayo. La militancia al completo de IU, y del PCE en lo que le compete, deben hablar y decidir, sin tener en cuenta los cantos de sirena de salvadores que, sin tener hasta ahora ningún peso real en la sociedad, quieren dar lecciones y decidir. IU, con un buen discurso, a mejorar mucho, sin duda, no debe perder el tiempo con los medios de comunicación que siempre han intentado socavar a IU y al PCE haciendo propaganda y campaña por el primer trepa que se les ocurría, o que previamente habían encumbrado. 

Dos cosas más de la actualidad. La primera es Siria, su situación y la cumbre Ginebra 2, que, ahora mismo, no sé qué dará de sí, aunque me temo que poco. Una cumbre que empieza con un nuevo montaje de la coalición de la guerra sobre 11.000 personas asesinadas por lo que ellos llaman el “régimen” de Assad. A estas alturas, el que no tenga claro, con todo lo que ha tenido que reconocer la prensa oficial, que lo que ocurre en Siria es un nuevo episodio del neocolonialismo capitalista occidental, encabezado por EE.UU, Francia y Reino Unido, del fascismo islamista de Arabia Saudí, Qatar, Emiratos…, de Turquía y del Estado sionista de Israel, es que es víctima, o cómplice, de la guerra de propaganda mercenaria y terrorista que asola Siria. Si siendo uno honrado, se cree esto, es mejor que se dedique a la petanca ya que la política le viene grande. Lo anterior viene a cuento de que hay demasiado silencio en la izquierda, cuando no tolerancia con los terroristas y mercenarios a los que se les denomina “rebeldes” que, según algunos/as, están haciendo, nada más y nada menos, que la revolución. Demasiada ambigüedad, equidistancia y silencio es objetivamente complicidad con lo que ocurre. Y no vale decir que se está contra la intervención pero callar ante los montajes y “argumentos” de la coalición de la guerra; o denunciar retóricamente la acción imperialista pero no intentar organizar una acción contundente en la calle, en las instituciones, en el movimiento sindical y en los movimientos sociales por la paz y contra la guerra. Parece que no sirve de nada la lección que se desprende de la destrucción de Iraq y Libia, por los mismos protagonistas.

Hablando de espesos silencios o tacticismos diletantes, algo parecido ocurre con el “dret a decidir”, eufemismo tramposo para la secesión. Y refugiarse en conceptos “históricos” fuera de época, acudiendo a citas de Lenin sesgadas y fuera de contexto, o jurando en falso la Carta de Derechos Humanos de la ONU, autoerigiéndose en paladines de una “democracia” liberal, no es marxista, ni leninista, ni internacionalista, pero, sobre todo, denota un nulo buen sentido común. Un ejemplo, firmar con ICV-EUiA papeles infumables, por erráticos, etéreos y alejados del contexto socioeconómico y político que vivimos, creyendo abarcar un espectro social más amplio, es lo contrario de consolidar un referente politico claro, sólido y sin concesiones a la galería. Y no vale luego rematar la faena con un discurso de apelación a un Estado federal, acompañado siempre de la coletilla del “derecho de autodeterminación”. Miren ustedes, si se quiere y se defiende un Estado federal, vayan recto y por derecho: “defendemos un Estado Federal Republicano, orientado a la democracia participativa y al socialismo, cuyo programa político para avanzar hacia ello se compone de tales y cuales líneas y puntos básicos”. “Y siendo conscientes de que en la actual correlación de fuerzas ello es difícilmente posible, proponemos y defendemos, como primer paso urgente, una reforma constitucional que enfrente los principales problemas socioeconómicos y culmine el estado de las autonomías en un Estado federal”.

Esta propuesta debería partir sin más dilación del PCE y, especialmente de IU, con una concepción abierta y unitaria, pero sobre la base de que nuestra soberanía no está de alquiler. Si no fuera así, ¿de qué hubiese servido la dura travesía del desierto que, poco a poco, con grandes sacrificios y poco pasteleo, estamos superando?

Y COMO SIEMPRE, HASTA CONSEGUIRLO, LIBERTAD PARA LOS CAMARADAS CUBANOS SECUESTRADOS EN EEUU. Y PARA MANNING.  SOLIDARIDAD CON ASSANGE Y SNOWDEN.

Publicado en la columna Silbando La Internacional, edición impresa de Mundo Obrero nº 269 del mes de febrero de 2014

http://www.mundoobrero.es/pl.php?id=3650

No hay comentarios:

Publicar un comentario